El implante de lentes ICL es la solución para defectos de refracción extremos (habitualmente miopía mayor de 6 dioptrías o hipermetropía mayor de 3) o bien pacientes con córneas muy finas que no pueden tratarse con láser; pero además se utiliza, aunque fuera de indicación, para corregir graduaciones residuales después de trasplantes de córnea.
Las lentes ICL están hechas de un material , el colámero, que ha demostrado durante más de 20 años su compatibilidad con el cuerpo humano. Se han implantado más de un millón en todo el mundo con mínimas complicaciones y muy buenos resultados. EL procedimiento es muy sencillo: bajo anestesia local , y contando con a colaboración del paciente, se realiza una pequeña incisión de 3mm por la que se implanta la lente en un proceso que dura aproximadamente unos 5 minutos y la herida se suele autosellar sin precisar puntos de sutura salvo en casos excepcionales.
Generalmente el paciente mejora su agudeza visu en las primeras 24 horas y puede prescindir de las gafas casi inmediatamente. Texto de Akademischer Ghostwriter
La Doctora Calatayud, más de 20 años de experiencia. Se formó como médico – oftalmóloga en el prestigioso Hospital Universitario Valle de Hebrón en Barcelona, donde fue jefa de residentes en su último año de formación. Médico Colegiada No. 30836