¿QUE ES?
La ambliopía u ojo vago es una condición que se produce cuando durante la infancia no se detectan defectos refractivos como la miopía, la hipermetropía y el astigmatismo.
¿POR QUE ES TAN IMPORTANTE?
Si no se corrige, el desarrollo de la visión en ese ojo no se completará al enviar una imagen borrosa al cerebro. Ésta es la razón por la que son tan importantes las revisiones oftalmológicas durante la infancia, porque permiten detectar problemas refractivos que se pueden solucionar fácilmente con gafas mientras el niño está creciendo.
En algunos casos, el niño desvía el ojo afectado por el esfuerzo que está haciendo para enfocar las imágenes, lo cual alerta a los padres para llevarlo al oftalmólogo, pero no siempre es así, en muchas ocasiones el ojo vago pasa desapercibido tanto para la familia como para los docentes que se encargan del niño en la escuela, y el diagnóstico llega tarde, cuando no se puede recuperar la función visual.
¿COMO SE TRATA?
El tratamiento del ojo vago es muy eficaz si se hace de forma correcta cuando el niño no ha finalizado la maduración del ojo y las áreas visuales del cerebro. Consisten simplemente en tapar el ojo “bueno” para estimular y hacer trabajar al vago, colocando la corrección con gafas si es precisa, durante un número de horas diarias que depende de la edad del niño y del grado de afectación de su agudeza visual. El oftalmólogo irá disminuyendo las horas conforme se observe mejoría y el niño vaya creciendo.
CUANDO DEBO LLEVAR A MI HIJO AL OFTALMÓLOGO?
Por todas estas razones se recomienda una visita en el oftalmólogo a todos los niños a partir de los 3 años de edad, que es cuando comienzan a reconocer los dibujos y saben distinguir algunos símbolos, de manera que podemos tener una idea aproximada de su visión; en niños más pequeños en los que se sospeche mala visión o con antecedentes familiares de ceguera u otra patología ocular se utilizan métodos especiales para explorar la visión.
La Doctora Calatayud, más de 20 años de experiencia. Se formó como médico – oftalmóloga en el prestigioso Hospital Universitario Valle de Hebrón en Barcelona, donde fue jefa de residentes en su último año de formación. Médico Colegiada No. 30836
"Muchos colegas piensan que mis pacientes están tan contentos conmigo por el alto grado de éxito quirúrgico. En realidad, los pacientes agradecen más que les trates bien; que les expliques el porqué de lo que les está pasando y les aconsejes y acompañes durante todo el proceso hasta la curación."
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